viernes, junio 16, 2006

El Fanatismo de la Vida

La Maya, es sin duda una de las culturas milenarias que más admiro y respeto, sus excelsos avances matemáticos como el precoz uso del cero, o su genialidad para describir el calendario astrológico e inclusive su arco falso arquitectónico son la muestra viviente que lo hecho en México estuvo, esta y estará bien hecho si se hace con nuestro carisma intrínseco; y también es una muestra, que el mexicano no cambia con el paso del tiempo, ya que los mayas entretenían sus vidas y sus fines de semana, de una forma muy similar que mis compatriotas actuales: con un deporte de balompié, no se si los mayas jugaban un “Peninsular” cada 4 años ó si esto es evolución por la globalización, pero lo cierto del caso es que hoy somos testigos de la mayor fiesta del deporte de los shorts y las piernas masculinas hermosas, el mundial Alemania 2006.


Es impresionante como escuchas del Mundial en todas partes con campañas publicitarias con los jugadores, que en muchos casos son peligrosas ya que pueden causar accidentes automovilísticos (¿acaso no has pasado a chocar por comerte con la mirada el anuncio de TELCEL en los camiones urbanos con los jugadores descamisados?). Muchos fans guardaron sus vacaciones y ahorros por bastante tiempo para poder asistir a los juegos en vivo, y aquí en México se paraliza la vida durante los encuentros, es más, es imposible conseguir original la camisa de la selección; vivimos un fanatismo extremo que hibridado con nacionalismo, nos lleva a celebrar, gritar y emocionarnos juntos; pero aparte del “Fut” hay muchos fanatismos tales como:

  • La Vida Sci-Fi y/o Fantasiosa: Mucha gente vive atorada en las películas de ciencia ficción, en su época StarWars y más contemporáneos Matrix o en libros de fantasía como Lord of the Rings o Crónicas de Narnia; todos estos han hecho que mucha gente viva una realidad paralela, donde toman las historias de sus películas o libros favoritas como biblias, y a sus protagonistas como deidades, tanto es su fervor que no se limitan a coleccionar hasta las armas, las estatuas de personajes y a saberse los guiones de memoria, sino que se confabulan en “congresos” donde se reúnen y hablan lengua hobbit o planean como salvar Sion del mal, aunque no te niego que si uno de ellos tuviera la cara de ángel de Elijah Wood, yo si le ayudo a cuidar su anillo, con todo y pulida.
  • Fisiculturismo: En el gimnasio no falta el clásico grupo de los “corte NewYork” en carne asada, están, magros, asediados y rociados de aceite para brillar y verse más apetitosos. Esta gente pude pasar más de 3 horas en el gimnasio, “jalando fierro” e hinchando aún más sus ya muy enormes bíceps triceps y nalguiceps, la manía de ser más grandes los lleva a tomar licuados de proteínas cual agua y a inyectarse y tomar cuanta cosa nueva saca el GNC y empiezan a vivir en torno a cuantos centímetros han aumentado en sus músculos.
  • Religiosos: Cada vez es más común ver desfilar por las calles no solo peregrinaciones guadalupanas sino también grupos de mormones (inconfundibles por sus faldas Morticia Adams) o esos gringuitos hermosos protestantes en bicicleta, la diversidad en religiones es buena mientras lleve a un mejor comportamiento de los adeptos y a un mundo más armonioso, el problema viene cuando la religión llega a extremos de querer vomitarle la Biblia encima a tus amigos porque los consideras “pecadores” o tu pasatiempo favorito es apretarte el ciclio cual Silas en el Código Da Vinci, muchos fanatismos religiosos pueden llegar a ser enfermizos y a desviar el propósito inicial de una religión, que es el unirte a una comunidad para servir a Dios con tus acciones, y se convierte más en una guerra por market share y te entrenan para ir a unir a cuanta persona camina por la calle y ver feo a los que no profesan tu fe.
  • Fashion-Addict: En este punto si observas un error de ortografía es porque estoy sangrando por morderme la lengua, ya que aunque me duela aceptarlo, el vivir tan a pecho la moda, que te prohíba usar ropa solo porque es de la temporada pasada, es algo excesivo, y debemos de aprender que aún cuando es una delicia portar los colores, estilos y cortes de vanguardia, es inhumano renovar nuestro guardarropa como renovamos células de la piel, y sabes que tienes este problema cuando compras tan seguido que no has usado muchas de tus adquisiciones y todavía están en la puerta de tu vestidor en sus respectivas bolsas de tienda.


Sin duda estamos rodeados de fanatismos de todo tipo, unos a nuestro criterio más obsesionantes que otros, pero que no podemos negar, a veces afectan nuestra vida personal, salud o bienestar financiero; pero cada persona es un mundo y no podemos ser jueces que cataloguen o desacrediten las “locuras” de nuestro prójimo, sino debemos centrarnos a como mejorar como personas, logrando un equilibrio entre cada uno de los planos en los que nos desarrollamos como individuos. Pero hay fanatismos y obsesiones que desde cualquier óptica son destructivos, y esos son el alcoholismo y la drogadicción, que lejos de acercarnos a ser mejores personas, nos hunden en círculos viciosos que nos apartan de nuestros seres queridos, de nuestras metas laborales y lejos de ayudarnos a solucionar nuestros problemas los hacen más grandes.


Así que en medio de esta “Fiesta mundialista” en la cual obviamente vamos a celebrar, hagámoslo todo con medida, con la consciencia clara de no excedernos y respetar nuestra vida y la de nuestro prójimo, tomando como unico fanatismo las ganas de vivir, y convencernos de que ser mejores cada día, en todas las facetas que se puede vivimos ¡SI SE PUEDE!, ¡SI SE PUEDE!, ¡SI SE PUEDE!.

PD. Como cultura general, el "juego de pelota" de la cultura maya, tenía como reto adicional que se anota el tanto a favor, al hacer pasar la pelota a través de un aro, pero se tiene que golpear la pelota para esta anotación, con la cadera, así que si tu trasero no le pide nada al de Selena, o tus caderas son muy a la JLo, ¡felicidades, tienes raices mayas!